Efesios 2:12 En aquel tiempo estabais sin Cristo,
alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los
pactos de la
promesa, sin esperanza
y sin Dios
en el mundo.
 
Introducción: Hace dos mil años, se abrió la amnistía de la salvación a todos los pueblos que no israelitas.
A partir de entonces es que todos los pueblos del mundo pueden aspirar a la salvación, con él solo hecho de aceptar a Jesucristo. Bien podemos decirlo de esta manera; Jesucristo abolió la esclavitud espiritual del mundo, y con ello también en muchos lugares, fue que la dignidad humana se restableció, y es que la esclavitud de personas ha estado siendo abolida. Jesús es el gran libertador.
 
Hasta antes de Jesucristo, todos los pueblos del mundo estaban sentenciados a vivir de forma amoral, en el cual dado que la condición del alma no era relevante, lo mismo daba vivir que matar, y esto hizo que muchos pueblos fueran como hasta hoy ocurre con aquellos que no aceptan la salvación, siguen torturando, asesinando y subyugando a quienes deberían de proteger, por el simple hecho de que fueron puestos a su cuidado.
El pertenecer a un pueblo alejado de Dios, ha dejado muchos sin sabores y problemas que son difíciles de entender, cuando no es posible ver con los ojos de quien ha alcanzado la salvación por la gracia Divina.
Vivimos en un tiempo maravilloso con acceso a la salvación, y deberíamos decírselo a la gente, con el fin de que ellos puedan disfrutar del mismo beneficio, solo que muchos han decidido vivir alejados de ella.